Tuesday, September 06, 2011

Radrigán: Marginal en la conmoción de Juán, Fernández.




Sin embargo, su premio siempre fue un Hecho Consumado

14 comments:

Juan José Grez García-Huidobro said...

Sin duda, no hay premio que valga para tal representante de esas realidades olvidadas, acalladas, "desaparecidas" de nuestro país, como lo es Juan Radrigán.
Saludos.

PD: Tan solo una página dedicada al premio, y 5 o 6 (en promedio, algunas veces más) a la "gran tragedia". Al parecer no todos opinamos lo mismo

Elena Antoine said...

En un lugar cualquiera se pierde un niño de sus padres. En un lugar cualquiera el mismo niño espera a que sus padres vuelvan por él. Curiosamente en un lugar cualquiera se encuentran los personajes de Juan Radrigán…
El tema que voy a tratar es esa constante que tiene los personajes de esperar y buscar a sus familias, pues como vimos en el loco y la triste y en Isabel desterrada en Isabel, tanto el Huinca , Eva e Isabel tienen familia y la recuerdan más de una vez a través del relato.
Cada uno a su manera tuvo diferentes anécdotas con ellos, pero si, todas significativas y marcadoras del modo de actuar de cada uno. El Huinca con muchas alas y pocas raíces, Isabel con la rabia de haber recibido una botella de alcohol como pago y Eva con los recuerdos de las enseñanzas de su madre. Todos los recuerdan con anhelo y esperanza y es desde ahí donde se abren ambos textos esa esperanza de cada uno de los protagonistas de reencontrarse con sus familias es el modo que tienen de escapar, aunque sea un poco, (unos cuantos minutos que dura el recuerdo) de la soledad que los inunda. “Tuve familia, que lindo seria que aparecieran de nuevo…” Un sentimiento puro y profundo que si se logra localizar y desprender del texto nos muestra que más allá de querer encontrarse con su familia o de la salir de la marginalidad que los envuelve como la niebla mas densa en la peor de las noches lo que realmente quieren es volver a encontrarse seguros, da lo mismo en donde, seguros y pertenecientes, confiados del sol que alumbrara mañana, como un niño que ve regresar a sus padres.

Germán Alcalde said...

La muerte en rodrigan es un tópico claro, en sus diálogos siempre se ven distintas posiciones frente a esta, ya sea con el loco y la triste (mientras el Huinca sugería que ahí una gran casa al final de todo, donde están todos los seres queridos y nadie ase mal a nadie, Eva creía que no había nada, que uno tenia que trabajar en la tierra para lograr lo que sea) o en hechos consumados (marta no vio nada cuando estaba muriendo, pero Emilio se negaba a aceptarlo) podemos notar que es un tema de sumo interés para Juan.
Este tema es una discusión que muchos tiene, es especial personas marginadas (como ya sabemos que es constante en el dramaturgo), ya que si la vida nada les dio, tiene que haber un consuelo después de esta. Rodrigan nos propone ambas posiciones y las hace dialogar haciendo la obra diferente para cada lector dependiendo de la posición de cada uno (En el loco y la triste gana el huinca, lo que lleva a un final trágico para los que optan porque la muerte es el final y feliz para los que pensamos que hay algo mas).
Al final nunca se muestra el resultado del problema, ya que nadie (ya que ni siquiera Radrigan lo sabe), pero si se ve el convencimiento y la fe de algunos, en donde la vida es mas feliz porque creen que no lo es todo.

Pilar said...

¿En qué se diferencia una prostituta que entrega placer a sus clientes por dinero de un vendedor que roba el último aliento del pájaro antes de venderlo? Se podría decir que en el sexo solamente, pues la corrupción esta presente en ambos como un método para sobrevivir.

En Radrigán los personajes se ven enfrentados a esta disyuntiva de la vida constantemente, que sin lugar a dudas está directamente relacionada con la marginalidad en la que viven. No hay lugar para la ingenuidad, a menos que prefieras empezar a hablarle a los tarros, la vida no te quiere ensuciando su sendero y desde entonces te has visto, sólo en las calles, transitar.

Solo quedan andrajos de dignidad que debes llevar cual si fueran capas reales, para seguir viviendo.

pascuala said...

Dios. A los 25 años publica el libro "Los vencidos no creen en Dios". Con este hecho comienza a abrirse esta mirada completamente enajenada a Dios.
Se puede apreciar que en ambos textos se hace presente el catolicismo, pero de algún u otro modo Radrigán se las arregla para burlarse de la manera mas cotidiana, simple, e hiriente posible.
Esto me hace reflexionar en cuanto a la posición de los marginados ante la presencia de Dios, la iglesia, la fe, la salvación.
Dándome cuenta de que los que optan por seguir este camino creyendo casi fielmente se ven atrapados en un mundo ingenuo a la espera de una solución divina (por que como todo chileno/a se quedan esperando con desidia), ya que el mundo es demasiado duro con ellos, etc. Cambien suelen culpar a Dios por todas las cosas malas que les ocurren, usándolo de escusa para sus errores mundanos.

Por otro lado los que se mantienen mas alejados, por lo menos en mi opinión, se mantienen mas realistas, con un pie en la tierra por así decirlo.

Las burlas de Radrigán no nos sorprenden, de hecho nos causan risa. ¿Sera que estamos en cierto modo en una posición parecida a esta marginalidad ante la religión?

pd: espero que sea suficiente.

Julia said...

Es increíble la inmensa cantidad de constantes que podemos notar en los textos de Radrigán, tal como podemos ver en "Isabel desterrada en Isabel" como en "El loco y la Triste". La verdad es que se me hizo muy difícil escoger uno de todos ellos por lo que me gustaría hacer una breve comparación de cada texto respecto a cada constante que en ellos se trata y refleja.


El primero y mas evidente es la Pobreza, en donde se esta se muestra como una condición de vida irreversible la cual los condena de por vida, tanto por como la sociedad los acepta como por la perdida de libertad que esta situación los induce a llegar a ella.
En "Isabel desterrada en Isabel" podemos identificar esta problemática debido a que esta mujer a lo largo de su vida ha tenido que estar acostumbrada a pasar hambre, a los malos tratos y a vivir con un constante prejuicios por parte de los demás. Algunos fragmentos significativos serian:

(Cuando la protagonista iba a asistir a la casa de sus suegros, debido al estado económico en el que se encontraban su amante no le permite ir debido a:) "Porque como ellos no'stán enamoraos de voh te van a mirar la pura ropa"
"Mi papá le rogó, porque l'hambre loos taba haciendo ver too negro"
"Puta, es un crimen el qu'stán haciendo conmigo, m' están matando entre too; y yo no l´hecho na a nadie, ser pobre nomá, andar así, pero ese no es ni'un delito, no es pa que me dejen sola, pa que nadie me hable..."

Y en el loco y la triste se puede reflejar en los siguientes fragmentos:
HUINCA: "¿Así porque no ando pintiao no me van a dejar andar por la calle" "Yo no le pío nada a nadie, lo único que ocupo es un poco de aire y un poco de sol... ¡No me pueen prohibir eso: no me pueen meter preso por estar viviendo!" EVA:"¿es grande el mundo ah?" / HUINCA "Puee ser, pero pa nosotros no" HUINCA: "Es cierto, aquí no hay ninguna cosa pa los que no vinimos con un cuchillo en la mano.. En cambio al otro lao..." "aqui no tenemos a aonde ir, aquí ta too arreglao pa que no tengamos ni'un brillo: lo que tenimos que hacer es irlos pa la casa grande" "Yo no he necesitao nunca na, por eso lo he pasao bien, pero he vivio entre puros muertos; ahora creen que uno ha muerto porque no tiene corbata: por eso me chorie y me quiero irme" EVA: "ahora que no ando cansa, pueo ganar plata: siempre hemos ganao; no vamos'estar na muertos vamos a tener pa too"

Julia said...

En el caso de "El loco y la Triste" Huinca ve la huida hacia la libertad a traves de la muerte donde Dios como no puede manejar la vida de la tierra, les dara a todos los que han sufrido la inigualdad un lugar donde todos seran iguales y donde todos seran libres y felices por lo que son, no por lo que tienen. Y Eva en ese sentido tiende a afianzarse mas al mundo terrenal, ya que ella en el amor que siente por Huinca encontro la esperanza que necesitaba para seguir viviendo y poder superar el concepto de no libertad que encontraba en su vida y en la pobreza.

Otro concepto interesante es el de la Muerte, en ambas obras cabe destacar que las familias de los protagonistas habian muerto años atras o los habian abandonado, dejandolos solos y despojados en este mundo que los enjuiciaban tan solo por su condicion social. Lo cual en el caso del "El loco y la triste" se refleja en la poca confianza que tenia Eva para confiar en si misma y en el resto, y en Huinca por el pavor que le tenia al compromiso ya que toda su vida su padre le habia mostrado que la vida era un viaje en camión sin parar donde no habia tiempo para detenerse y hacer feliz o compartir con el que se tenia al lado, encerrandolo en un egocentrismo que lo aferraba a un estilo de vida sin compromisos, en donde lo mas importante era el goce estetico del minuto.
Y en el caso de "Isabel desterrada en Isabel" se puede notar debido a su miedo a quedarse sola, a no tener con quien hablar. Ya que como había perdido de diversas formas a la gente que mas queria (la muerte de sus padres y el encarcelamiento de su novio gracias a ella) no podia permitirse a si misma sentirse abandonada, por eso en varios fragmentos de este texto, la protagonista reitera el hecho que la gente que habla sola es porque se volvio loca, aunque lamentablente esta se estuviera dirijiendo a un tarro de basura, situacion que alfinal de la obra termina con que esta mujer al ver que este objeto no le respondia le preguntaba "¿Que acaso no soy gente yo?" lo que demuestra que nisiquiera fue capaz de darse cuenta en una situacion tan extrema como esa y lo que refleja al mismo tiempo su temor de no sentirse "gente" por no tener con quien hablar

Un punto mas que me parece coincidente y relevante en ambos textos escritos por Radrigan, es el hecho que a todos estos llamativos personajes les daba nervio hablar de su pasado, de reconocer su triste realidad. Y es por esta razon que tienden a evadir esos pensamientos no aceptando su realidad.

Julia said...

En el caso de "Isabel desterrada en Isabel" podemos reflejarlo en el hecho que esta mujer no quisiera asumir su soledad, o como cuando conocio a su pareja en donde ninguno de los dos se refirio a su pasado porque segun el "Cuando uno conoce a alguien, vuelve a nacer".
O tambien en "El loco y la triste" ninguno de los dos personajes era capaz de aceptar los errores de su vida pasada tanto como que Eva era prostituta como Huinca era un borracho.
Ambas obras tienen en común el hecho que los dias que son "de fiesta" tanto el domingo (en el caso de "Isabel desterrada en Isabel") como la celebracion del 18 (en el caso de "El loco y la triste")los hacia recordar la perdida de sus seres queridos y lo vacios que se sentian.
Todo esto evidentemente les producia una gran nostalgia que trataban de evadir a traves de sus vicios o locuras.

Julia said...

Entonces las constantes que puedo destacar son:
- Pobreza
- Hambre
- Abandono
- Muerte
- Cariño y respeto a los familiares
- Nostalgia por recordar el pasado
- Miedo a volverse loco
- Miedo a la Soledad
- Confianza en Dios
- Miedo al compromiso
- Ancias a la libertad
- Confianza en el padre
- Recuerdos mas latentes en dias de fiestas
- Prejuicio social por la condicion de pobreza
- Anhelo de una casa o lugar propio

Fue interesante comparar estas dos lecturas, lo cual a mi parecer habla mucho de la forma de pensar que tiene el escritor Juan Radrigán , a través de un juego en donde conociendo la vida de estos seres y analizando su psicología, forma de pensar y de actuar, se puede profundizar mas en un tema o explayar mas un punto de vista que quizás de otra forma, en donde esta no afecta a nadie si no que te hace ponerte en el lugar de estos personajes para poder entender quizás lo que el autor siente.

Isa Irureta. said...

"Pero no mi' hallo encerrá, me gusta tar al medio de la vía; ver caras, gente, perros, árboles, pájaros, toas esas cuestiones que le dicen a una que no sía muerto, aunque el corazón haya caío a un hoyo donde no hay ninguna lu. Es cierto que toos los días paso sola, pero parece qu'e el domingo una tuviera dos veces abandonada. Yo no sé porqué pasa eso, no se porqué en los días de fiesta me duele más pa entro la soledá: por eso salgo andar."

Desde el principio te da a entender que está sola, y luego te va contando cómo se fue quedando ella y su soledad.
Así mismo en "El loco y la triste", se muestra cómo estos dos personajes están enterrados por la soledad.
En los dos casos buscan cómo salir de ésta. En el caso de Isabel, sale a "andar" para poder sentir la presencia de los demás, le habla al tarro, para sentirse algo más acompañada y tener a quién (o inventarse a quién) la escuche y contarle sus historias - recuerdos -,sintiendo que realmente le importa a alguien, y dentro de su monólogo busca encontrar todos aquellos recuerdos que de algún modo la hacen sentir viva, o que más bien vivió, y busca el sentirse reconfortada con ello; el convencerse de que no estuvo sola, y así también sentirse acompañada por los recuerdos.
Y en el "Loco y la triste", es un caso parecido, con la diferencia de que ambos tienen alguien que los escuche de verdad (otra persona), y cuentan sus distintas historias, pero en el fondo, ambos saben lo solos que están y también buscan ese "apoyo" en sus recuerdos, pero al final de cuentas la realidad los ataca, mostrando aún más su soledad y el agobio que ésta les presenta.

"Oye, güeno, pucha; hace rato qu' estoy hablando yo sola nomás po. ¿Qué no soy amigo mío voh?¿No me emprestaste un fierro, no m' escuchaste como una hora?¿O también te creís muy tremendo? Habla po, ¿qué no soy gente yo también?¿No soy gente? ¡Habla, habla,habla!. En la pieza no hay nadie, no hay nadien en ninguna parte...¡Por favor, háblame,háblame,háblame!..."

Juan José Grez said...

J.R.: Señora..
Isabel: me ta' hablando a mi ?
J.R.: Si, claro. Se ve bastante sola hablandole a un tarro de basura. No se le ofrecería un cigarro?
J.R.: y yo que crei que era callao', por eso no mi respondia el desgraciao este. Ya que me ofrece, le acepto el puchito. Uste anda medio mal, sabe? aonde se ha visto que 'eñores con eso lucero de ojo anden hablando con gente como una.. nunca po!
J.R.: No está muy lejana a la verdad señora. Antes de hoy día no se me hubiera ocurrido hacer esto, pero algo cambio todo. Hoy día vi una obra de teatro que lo cambio todo. Se llamaba algo así como Isabel desterrada en.. algo, y era de un tal J.R.
Isabel: Mire lo que son la coincidencia. Yo mi llamo isabel y he escuchao por ahí que un eñor llamao J.R. escribió de mi po, pero uste sae que una nunca llega a escribir ni meno a leer...

Que pasaría si por cada una persona que leyera algo de Radrigan, recreara una escena en la vida real? El mundo sería algo mejor.
Sin duda les daríamos ESPERANZA.

Más que una constante a nivel del texto (literaria), es más del autor y esa sería querer afectar al lector de tal modo que se de cuenta de realidades que el santiago olvida, esconde, desaparece. Para mi, Juan Radrigan quiere que seas la otra parte de la historia, quiere que aceptes dar ese cigarro a la señora o no dejar en la calle a todas las personas que vivían en población (como sucede en el loco y la triste).
Esta constante, va de la mano con la esperanza. No hay párrafo que no aparezca la esperanza, la carencia o la abundancia de ella (El huinca no tenía esperanza, no así Isabel, que seguía esperando a su Padre). Siempre se ha dicho que la esperanza es lo último que se pierda, por ende, para perderla hay que recorrer un largo y terrible camino. Muchos de los personajes representados por Radrigan, ya lo han recorrido. El llamado de radrigán y la presencia de la esperanza como constante en los textos nos hacen actuar frente a una realidad bastante presente en nuestro Chile. Mi punto o proposición de lectura es esa; leer a radrigan como una guía de vida, descifrando cada constante para tomarla como una misión diaria y así lograr disfrutar al máxima las vivencias de este gran autor.

J.R.: Desde hoy, no dormiré tranquilo con esta realidad, desde hoy no estaré cómodo con esta desigualdad.
Isabel: Que lástima señorsito, yo estoy plena aquí. No me siento pa' na' sola, si fuese así estaría hablando solita pue'. Pucha que hay que estar mal pa' hablar sola. Y hablando de escopeta, no dejemo' solito a este, que es callao' pero no tonto...(mira al tarro relleno de basura)

J. Tomas Lavin said...

La rebelión ante la injusticia me parece que es un tema medular en estas obras, por ejemplo, cuando el loco busca escapar de la realidad tomando, anhelando un paraíso final o cuando la prostituta se resguarda en la casa; también demuestran una tendencia a conformarse con lo que tienen y así arrastran sus problemas hasta que se acabe lo poco que les queda de vida, sin intentar solucionarlos. Isabel se rebela contra su situación, ella pretende ser querida,aceptada, entendida y, al igual que Zelig,intenta ser aceptada por la sociedad.

Radrigan me pareció un escritor sensible, que sin sofisticaciones muestra profundamente la realidad de las comunidades menos afortunadas y, analizando el contexto (dictadura militar), creo que hay grandes criticas a la sociedad que también son aplicables a la actualidad.

Juan José Grez said...

Profesor, encontré esto, una nueva película de Wim Wenders. Esta era la única forma de mostrarselo.

http://www.youtube.com/watch?v=LGKzXUWAjnI

Ahí está el link para ver el trailer.

Nico Lorenzini said...

Las constantes de Radrigán que me aparecieron:
La nostalgia, el Huinca lo único que quería era morirse en un lugar parecido al que lo fue a buscar hace mucho tiempo su taita.
Isabel hecha de menos los tiempos con el Aliro y dice expresamente que lo que duele más no son las cosas malas, sino que las cosas buenas que uno tuvo y que ya no tiene más. Y eso es porque si yo nunca he experimentado algún tipo de alegría, no la voy a extrañar, pero si la he experimentado y al mismo tiempo se que no la voy a poder experimentar ahora, es cuando duele.

Otra cosa en común entre el Huinca y Isabel es el importante rol que tiene la calle en sus vidas, el Huinca por su poco enraizamiento e Isabel para sentirse más acompañada, aunque sea por el ruido de las masas de gente que no saben que ella existe

Otra cosa que me sorprendió es que los dos de alguna manera se entablan en un diálogo con Dios, el Huinca por un lado haciendo como si el fuera Dios, y Isabel, diciendo que le diría si fuese la esposa del Señor. El Dios de Huinca dice que es el hombre el que tiene que arreglar sus propios problemas porque él no es capataz y ya les dijo como debían hacerlo, o sea no interviene, a no ser de que “lo mosqueen mucho” (palabras del Huinca). En cambio Isabel le pide a Dios que se tire uno milagritos para que la gente pobre que vive en la miseria vuelva a creer en el y los ricos que están muy ocupados con sus paseos vuelvan a acordarse de él.

En las dos historias se habla del papá del personaje y de su rol de encontrar al hijo. El papá de Isabel le dice al Isabel que si se pierde solo debe esperar quietita, asimismo como hizo el Huinca cuando se perdió y fue encontrado por su papá en ese lugar tan anhelado por él. Es aquí donde se ve la necesidad de lo personajes de ser queridos, de ser simplemente pescados por otro, de que alguien fuera de mi se preocupe por mí y yo simplemente me quede sentado esperando recibir una mínima expresión de cariño, expresión de cariño que no reciben los personajes de esta obra en la sociedad, siendo totalmente invisibles en los dos casos, tanto que en una, la protagonista termina entablando una conversación con un tarro, y en otra terminan muertos por una demolición que nunca supo y nunca sabrán que se encontraban ahí.